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jueves, 17 de diciembre de 2015

NUESTRA OBSCURIDAD INTERIOR


Yo soy esa voz, la que te habla en tu cabeza y te susurra cosas horribles. Yo soy ese escalofrío gélido que recorre tu espalda y que te dice que, ¡no estás solo! Ahora querrás, huir de mi pero ambos sabemos,que no puedes correr eternamente. Te agotarás, yo no, y, cuando te detengas ¡te atraparé! La luz del día te traicionará, te abandonará, y cuando estés en la obscuridad total, estarás en mi reino ¡y te torturaré por toda la eternidad.                                                                                                        José María Gordillo

Los niños del parque

Juanito a sus cinco años dominaba el arte de fabricar castillos de arena.
Pedrito con un año menos le seguía de cerca, pero su control se basaba en las formas estrelladas.
El parque era su punto de encuentro y las seis de la tarde el momento en el que se sentaban juntos a los columpios y sus manitas construían unas veces juntas y otras por separado, todo aquello que la arena les dejaba imaginar.
Aquella tarde unos saltamontes se acercaron a curiosear dejando que sus patitas se pasaran sobre algunas puntas de estrella y sobre algunas almenas del castillo.
Solo sus minúsculas huellas dejaron el rastro de su paso por allí, después Juanito y Pedrito abrirían boca con ellos, para a continuación dejar paso a los potitos de fruta con que todas las tardes merendaban.

                                                                                     Cira Díez

miércoles, 16 de diciembre de 2015

El lobo 333


Ya no recuerdo como me llamo, por eso siento no presentarme; pero lo que debéis saber es que si alguna vez conducís por la carretera 52 de EE.UU, tenéis que saber que nunca debéis pararos si veis a un lobo cojo cruzando la calle. A cualquier persona se le encogería el corazón, pero las leyendas urbanas cuentan, que al seguirlo, te llevará hasta un manicomio.

En él que te dicen que el lobo ha sido una imaginación tuya y por eso te obligan a permanecer en el manicomio para ver qué te sucede. Curiosamente a todas las personas, las ingresan en la habitación “333”. Me incluyo cuando digo que esa habitación es mucho peor que la muerte, preferiría que me arrancaran los ojos a entrar en ese lugar.

Cuando pasas la primera noche y te hechas a dormir, empiezas a oír una voz que te dice corre, después escuchas otra que te dice lo mismo y así hasta que te despiertas exhausto y gritas: ¡dejadme en paz!

Tras ese grito una enfermera acude a tu habitación y te dice que intentes dormir. Pero cuando te duermes las voces te dicen: Te avisamos....

Al día siguiente, te darás cuenta que en el manicomio solo estás tú, lo que te resultará extraño y volverás a tu habitación, ya que cuando intentas irte corriendo de ahí algún pensamiento extraño te obliga a quedarte.

La segunda noche, cuando duermes entras en una sala en la cual te espera el mismo lobo que te metió en el manicomio, estás atado y poor mucho que grites nadie te oye, ni siquiera tu mismo. El lobo se arranca el corazón y lo pone en una balanza y te dice: Ahora si pesan lo mismo que el mio, te dejaré marchar...

Así, con su afilada garra, te saca de la barriga, literalmente el hígado, y te dice que ya no lo necesitaras. Cuando lo pesa y no coincide, te dice, mañana será otro día...

Así, cuando despiertas, empiezas a convulsionar y los médicos dicen que has perdido el hígado y que te quedan 6 días de vida.

Esto, se repite noche tras noche con otros órganos y ves como se va desgarrando cada parte de tu cuerpo. Por eso el ultimo día te arranca el corazón y al pesarlo, si no coincide te dice: Mala suerte.... Y misteriosamente mueres y ves como las personas de tu familia lamentan y lloran y algunos hasta mueren de dolor por tu pérdida, y lo peor es que no puedes hacer nada. Esa es la peor condena que un ser humano puede vivir, las leyendas dicen que el “Lobo 333”. Es la reencarnación del peor terrorista de la historia, y que por cada persona que va matando y haciéndole sufrir, va acumulando una especie de puntos, los cuales usará para algún fin desconocido.

Con esto, concluyo la historia por que me toca avisar a una nueva persona de que corra antes de que le pase lo mismo.

                                                                                                      Alejandro García

ESCRIBIMOS RELATOS DE TERROR

Tras leer relatos de Ajuar funerario de Fernando Iwasaki, escribimos relatos de terror inspirados en ellos. Así quedaron los textos.